El coaching es el arte de ayudar al cliente a aprender, en lugar de enseñarle
Seguramente habrás escuchado hablar en los últimos años acerca de los “Coaches”. Posiblemente en programas de televisión, en el mundo de los famosos, en el área deportiva, e incluso en algunos ámbitos empresariales.
Pero seguramente todavía no tienes CLARO del todo ¿qué hacemos los coaches? ¿qué hemos estudiado para hacerlo? y ¿si puede ser de utilidad en tu caso particular?
Por eso, te invito a que leas atentamente esta página y todas estas preguntas recurrentes:
Un Coach Personal es aquella persona que te ayuda a conseguir unos objetivos determinados, en un periodo de tiempo concreto (no más largo de unos 8-12 meses) y que te impulsa y te motiva en cada una de las sesiones para que tú mismo obtengas las respuestas que necesitas y que aprendas en ese proceso de crecimiento personal.
Por el contrario, un Coach Personal NO es;
¡No! Aunque el objetivo de ambos profesionales puede ser parecido, “que la persona mejore y esté bien consigo misma”, son cosas distintas.
Un Psicólogo es un profesional que ha estudiado una carrera de la rama de las Ciencias de la Salud y que está capacitado para trabajar desde un punto de vista terapéutico. En su caso, se habla de “pacientes”.
En el Coaching, los profesionales, hemos recibido una formación especializada y acreditada por distintos organismos y no hablamos de pacientes, sino de “clientes”.
El trabajo del Coaching se enfoca, sobre todo, en poder pasar a la acción
Un Coach puede ayudarte en muchísimos temas del día a día, pero seguramente la clave es saber cuándo; “no soy capaz de hacer lo que me propongo” o “hay cosas que me bloquean y no consigo dar el siguiente paso”.
Quizás, tampoco sepas ¿qué cosas quieres hacer en tu vida? ¡tienes dudas respecto por dónde tirar!
Todos esas situaciones son buenos puntos de partida
¡Desde luego! En mi caso concreto he sido paciente y cliente al mismo tiempo y te puedo asegurar que el proceso ha sido maravilloso. La capacidad de aprendizaje y crecimiento personal ha sido aún mayor.
Cada vez hay más psicólogos que dejan de ver la figura del coach como “un enemigo” e incluso recomiendan a sus pacientes que empiecen un proceso de coaching.
Yo mismo soy estudiante universitario de Psicología e intento seguir aprendiendo sobre la mente día a día
Las sesiones con un Coach siempre tienen un punto de partida; “el o los objetivos” de todo el proceso o de la sesión.
Una vez definidos los objetivos que quieres conseguir o alcanzar, llega el momento de la fase de “aprendizaje” en la que como Coach te formulo preguntas poderosas que te hacen reflexionar y posiblemente te hagan cambiar de perspectiva.
En otras ocasiones hacemos ejercicios concretos que sirven para encontrar respuestas a temas que seguramente te inquietan.
Para terminar y con esa “nueva mirada”, se define un Plan de Acción, fundamental en todo proceso de coaching. Gracias a esas acciones que salen de cada sesión, es posible crecer cada día y acercarnos a esos objetivos generales.
Normalmente mis sesiones de coaching oscilan entre los 60 y los 90 minutos. No me gusta trabajar con la presión del tiempo, ni que el clienta sienta que está pagando por minutos…
Lo importante para mí es la burbuja que se crea en el proceso y para ello, es necesario tiempo
Si algo nos ha demostrado la pandemia generada por el Coronavirus, es que los procesos de Coaching Online pueden resultar igual de satisfactorios que los Presenciales.
La duración de las sesiones es la misma (entre 60 y 90 min), las herramientas de trabajo igual y lo único cambia es la forma de comunicación.
Realizo las sesiones ONLINE a través de videollamada, por ZOOM o por otras plataformas y hasta la fecha, puedo asegurarte que han tenido el mismo éxito que las que realizo cara a cara físicamente
La parte más bonita e interesante del coaching (en mi opinión) es esta.
No siempre se consiguen los objetivos planteados en la sesión 0, ya que en coaching se produce un aprendizaje transformacional (en el que la persona va cambiado su forma de mirar la vida y sobre todo, su forma de mirarse a si mismo).
No es un aprendizaje operativo (como aprender un deporte, un idioma o una clase de música), es un aprendizaje que te hace crecer como persona superándote a ti mismo durante todo el proceso
Te invito a que leas atentamente el apartado que decido a la SESIÓN 0 en esta web y que puedas solicitarme una, de manera totalmente GRATUITA
Un proceso de coaching suele durar entre las 7-8 y las 10-12 sesiones (es una estimación aproximada). El motivo por el que se limita en el tiempo, es que el cliente tome responsabilidad y suelte el posible “apego” que puede generar con el coach.
Al final todo dependerá de cómo ha ido el proceso, la consecución de los objetivos y si se han alcanzado los medidores planteados en la primera sesión.
¿Tienes dinero para irte de fiesta y gastártelo en copas?
Pues entonces… seguro que puedes permitirte un proceso de Coaching. A diferencia de lo que mucha gente piensa, el Coaching es una disciplina que sirve para cualquier persona. No es algo exclusivo para las personas con mucho dinero, famosas o que trabajan como directivas de grandes empresa.
Si quieres contratar mis servicios, mándame un email a info@rafarodrigo.com o escríbeme en este formulario para solicitar tu presupuesto
Es lógico que llegado a este punto te plantees si YO puedo ser de utilidad o si soy el Coach más apropiado para tus necesidades a nivel ejecutivo.
Por ello, te invito a que leas mi biografía en esta web y puedas ver QUIÉN SOY y sobre todo, QUÉ HAGO.
No obstante, puedes leer la opinión de alguno de los clientes con los que ya he trabajado
Como Coach me comprometo con mis clientes a hacerles un seguimiento fuera de las sesiones, a estar disponible para sus dudas o consultas y en definitiva, para apoyarles y motivarles en todo momento
Mi compromiso es que los clientes evolucionen pasando a la acción y en caso de no hacerlo, tener la responsabilidad de hacerlo evidente e incluso finalizando un proceso si lo considero oportuno, desde el respeto y la compasión amorosa
Después de cada sesión me gusta ofrecer herramientas a mis clientes. En muchas ocasiones mando tareas, lecturas, vídeos o material, que en definitiva, pueda resultar interesante y complementario para el proceso de coaching